A poco más de un kilómetro de Pozondón en dirección a Rodanas parte a la derecha una pista de unos 7 kms. que termina en una explanada con mesas y bancos de lo más dominguero, ahí está.
De piedra roja, rodeno, que parecen peyas de plastilina aplastadas. El nombre se la dan estas losas, aunque en la actualidad ha quedado como su fuera el apellido de la familia «Ares».
Junto con el también rojizo Peracense y el de Alba formaban la línea defensiva entre el reino de Aragón y el Señorío de Albarracín en el siglo XII.