Obviamos la bromita de la forma, los escaladores están enamorados de ellas ycon prismáticos se alcanzan a ver sus pequeños puntitos en la ladera.
Cerca, en Agüero hay otros mallos menos famosos pero igual de impresionantes.
Hacia el norte, entrada a las míticas Curvas del Jabalí (como en Madrid la Cruz Verde), pero con río a la vera y la posibilidad de encontrar, pasado el Embalse de La Peña, ambiente motero al este, en el cámping de Anzánigo, o tomar las abiertas curvas de Puente de la Reina al este.