A unos 10kms. al norte de Huesca se encuentra el aeródromo de Igriés, donde vuela y planean todo tipo de réplicas e invenciones a hélice y reacción, incluyendo una segadora voladora.
Una pista muy corta y asequible – cuando no tiene charcos – desemboca en la carretera que lleva al cinematográfico Castillo de Loarre.